Hoy os traemos una receta, que aunque lleva algo de tiempo, merece mucho la pena. Siempre viene bien tener unos pimientos asados para acompañar alguna carne o con ventresca por ejemplo. Nosotros vamos a hacer 3 pimientos, pero vosotros podéis seguir la receta con los que queráis que no cambiará nada.
Preparación:
- A nivel de ingredientes, esta receta no puede ser más simple. Necesitaremos pimientos rojos de asar, aceite de oliva y sal.
- Lo primero que tenemos que hacer es lavar con agua muy bien los pimientos y secarlos con papel de cocina. A continuación, los colocamos en la bandeja del horno y les damos una pincelada de aceite y sal al gusto. Mientras tanto podemos ir precalentando el horno a 200ºC.
- Los metemos en el horno a 180ºC algo menos de 50 minutos. Cuando lleven la mitad del tiempo, les daremos la vuelta ayudándonos de unas pinzas. En este momento el olor a pimientos le debería llegar ya a todos los vecinos.
- Pasados los 50 minutos (según el tamaño de los pimientos podrán ser +-5 minutos), los sacamos y tendrán esta pinta.
- Los dejamos que se enfríen un poco y los cubrimos con el mismo papel de horno haciendo un saquito que tapamos con las pinzas que hemos usado para darle la vuelta a los pimientos.
- Una vez que estén fríos y ya podamos manipularlos con las manos, vamos con cuidado quitándoles la piel, que debería salir fácilmente, y los vamos cortando en tiras.
Han quedado muy bien, creo que voy a aprovechar unos pocos como guarnición para unas hamburguesas.
0 comentarios:
Publicar un comentario